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lunes, 26 de mayo de 2008

papiloma vacuna , galicia


La Opinion , La Coruña

Sanidade incluirá la vacuna en el calendario oficial para las niñas que cumplan 14 años a partir del 1 de julio. El precio del fármaco, que se vende en farmacias, supera los 450 euros.
ALICIA QUINTÁ / AGENCIAS. A CORUÑA / MADRID. La vacuna contra virus del papiloma humano, comercializada desde hace meses por dos laboratorios bajo el nombre de Gardasil y Cervarix, se incluirá en el programa de vacunación en Galicia tras el verano para las niñas que cumplan 14 años a partir del 1 de julio, explicó Xulio Hervada, subdirector de Epidemiología de la Consellería de Sanidade.
Pese a que "todavía hay detalles por concretar", tras la inclusión el pasado 10 de abril en el Consello de la Xunta del presupuesto destinado por el Gobierno gallego para esta vacuna, ahora se inician los pasos para ofertarla dentro del plan de vacunación a todas las menores "que vayan cumpliendo esa edad".
Bastante debatida estuvo la edad de corte elegida para iniciar la vacunación, sobre todo porque se habla de una vacuna costosa, "la más cara del mercado en este momento", indica Hervada, superando los 450 euros por persona, pero tras un análisis y debate en la comisión interterritorial de salud, "casi todas las comunidades nos decantamos por los 14 años".
Los expertos indican que lo ideal es ponerla entre los 12 y 14, pero "ahora solo podíamos hacer frente a un corte, no a todo lo que nos gustaría", por lo que los 14 se establecieron teniendo en cuenta determinados parámetros y pensando en que "así conseguiremos una protección hasta pasados los 21 años, una de las franjas con más proliferación del virus", subraya Hervada.
Otro factor, explica, es que antes de esa edad "el índice de personas que ha iniciado las relaciones sexuales es anecdótico, por lo que las posibilidades de infección son mucho menores", una opinión compartida por la ginecóloga Ana López Roca, quien recuerda, además, que "debe ponerse antes de que se inicien contactos sexuales".
En cuanto al máximo establecido, los 26 años constituyen el tope para vacunarse, ya que es la cifra hasta la que existen resultados de eficacia tras los ensayos clínicos, pero López Roca se muestra convencida de que el perfeccionamiento de la vacuna irá permitiendo mayores protecciones y en más franjas de edad.
El virus del papiloma humano es el causante directo del cáncer de cérvix, con 2.100 nuevos casos anuales en España que, según los datos de la Organización Mundial de Salud (OMS), son los segundos más frecuentes entre las mujeres de entre 15 y 44 años, sólo por detrás del cáncer de mama.
Los ensayos clínicos han demostrado que esta vacuna es efectiva en las dos variantes más agresivas del virus, la 16 y 18, que provocan alrededor del 70% de los casos de cáncer de cuello de útero. De ahí la relevancia que ha adquirido esta vacuna, pero al mismo tiempo, "hay que pensar que hay otros tipos, 15 en concreto" para los que la vacuna no es efectiva, recuerda Hervada.
Un recordatorio que llama a la prevención, pero no a la alarma, ya que "es necesario incidir en que el propio sistema inmunológico acaba la mayor parte de las veces con la infección", explica López Roca. "Prueba de ello es la alta incidencia de este virus y el bajo número que desencadena en cáncer en comparación con las personas que en algún momento de su vida lo padecen", subraya.
El subdirector de Salud Pública recuerda, además, la necesidad de realizarse, las revisiones ginecológicas pertinentes, ya que en este caso, la única medida preventiva es el cribado, a través de las citologías regulares, que se recomiendan a partir de los 20 años y antes si se inician relaciones sexuales. Y es que, como todo virus de transmisión sexual, las barreras como el preservativo son medidas fundamentales, pero en este caso no totales, pues "los órganos perineales pueden permitir el contagio", de ahí que sea necesario conjugar los distintos sistemas preventivos, a la vez que "una vida sexual sana", añade la ginecóloga López Roca.
Al llegar a este punto, López Roca destaca que "la vacuna sólo evita unos tipos de virus, por lo que el cribado citológico deberá continuar", eso sí, "será posible ampliar los tiempos para las revisiones, ya que si ahora son cada año, con la vacuna podrán ser cada cinco", añade Hervada.