ABC digital 8- Julio-2008
Madrid La Comunidad intenta que todos los médicos especialistas receten
CHEMA BARROSO Juan José Güemes-LUIS CANO
MADRID. Todos los médicos de los hospitales que trabajan con la Comunidad de Madrid, tanto públicos como privados, podrán extender recetas del sistema público de salud a sus pacientes. La medida pretende liberar de trabajo a los médicos de atención primaria, que pierden un 40% de su tiempo en labores de administración de fármacos prescritos por los centros especializados.
El principal criterio de la medida, asumida por la Consejería de Sanidad, es que los médicos de atención especializada elaboren las primeras recetas a cada paciente. Antes, los enfermos tenían que acudir a su centro de atención primaria, después de pasar por el hospital, para cumplimentar la nota con los medicamentos dispuestos por orden del especialista. El médico de familia asumía la responsabilidad de confirmar la medicación sin ser ellos los prescriptores. La medida beneficia especialmente a los 400.000 enfermos atendidos por la Fundación Jiménez Díaz y los 95.000 del Hospital Infanta Elena de Valdemoro.
Sin embargo, la iniciativa no satisface al Grupo Antiburocracia de Atención Primaria de Madrid. De momento, mantiene el plante, a partir del 1 de septiembre, de que los médicos de familia no vuelvan a extender recetas no prescritas por ellos mismos. El grupo está apoyado por cuatro organizaciones científicas, entre ellas, la Sociedad Española de Medicina General.
El Grupo Antiburocrático continúa con su petición de que la Consejería obligue a todos los hospitales a extender sus propias recetas, en lugar de darles simplemente la posibilidad opcional de hacerlo, como ocurre con esta medida. El presidente de la Sociedad Madrileña de Sanidad General aseguró que no es imposible, puesto que en autonomías como la Comunidad de Valencia ya está fijado.
La Consejería también pondrá en marcha la receta electrónica para facilitar los trámites del acceso a fármacos.